Reducción de la producciónde plásticos: El imperativo climático

- Plástico -

Antes de la cuarta ronda de negociaciones de las Naciones Unidas para un tratado global sobre plásticos que se llevará a cabo del 23 al 29 de abril en Ottawa, el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley (LBNL) publicó un estudio pionero que revela el enorme impacto climático de la producción de plástico. La Alianza Global para Alternativas a la Incineración (GAIA) ha preparado un informe de políticas que muestra cuán rápido el mundo debe reducir la producción de plástico para evitar un calentamiento catastrófico. Las conclusiones del informe refuerzan la importancia de que el tratado de plásticos cubra todo el ciclo de vida del plástico, desde la extracción hasta la eliminación, tal como se consagra en el acuerdo entre 175 países -la Resolución 5/14 de la UNEA-, que constituye la base de las conversaciones en relación con el tratado. 

Principales conclusiones: 

  • El impacto de los plásticos en el clima comienza con la fase de extracción. El 75% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de la producción de plásticos primarios se producen antes de la etapa de polimerización. Con vistas a comprender, medir, evaluar y abordar en forma cabal el impacto de la contaminación por plásticos, la evaluación y los controles regulatorios deben considerar el ciclo de vida completo, que comienza con la extracción. 
  • El incremento en la producción de plástico por sí solo arruinará Dlos objetivos climáticos internacionales. Incluso si todas las demás fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero (transporte, electricidad, agricultura, industria pesada, etc.) se descarbonizaran milagrosa y completamente en 2024, con las tasas de crecimiento actuales, la producción de plásticos primarios por sí sola consumiría por completo el presupuesto mundial de carbono para el año 2060 y, a más tardar, para 2083. 
  • Se requieren recortes profundos y rápidos en la producción de plástico conforme lo establecido en el Acuerdo de París. Para evitar superar el límite de 1,5°C establecido en el Acuerdo de París, a partir de 2024, la producción de plásticos primarios debe disminuirse entre al menos 12% y 17% por año.